El sábado 2 de julio por la noche, el Festival Río Babel bajó el telón definitivo tras tres jornadas de grandes eventos en directo; y no solo musicales: entre las novedades de esta edición, destaca la carpa del Babel Comedy. Aunque ni el jueves ni el viernes pude acercarme a ella, ayer fue una parada obligatoria antes de despedirse del festival madrileño. Así, pasaron por el escenario los cómicos Galder Varas como presentador con su increíble capacidad para interactuar con el público, el venezolano Daniel Pistola, Lalachus y su fantástico monólogo sobre lo inocente que era de pequeña y, por último, Valeria Ros, a la que solo pude ver durante los primeros minutos por solaparse con el concierto de Residente. De esta forma, el último día volví a casa con risas bajo el brazo y los recuerdos de mis tres últimos espectáculos en Río Babel, donde brillaron el rap y la música latina. Vamos con ellos.

Crónica: Diego Simón
Fotografía: Luis Brato

Muerdo y su ritmo latino

El proyecto multicultural de Muerdo consiguió una fidelidad con el público de Río Babel sin igual. Él y los cinco integrantes de su banda llenaron el escenario Finetwork de música folk, urbana y, sobre todo, latina. Pero también de crítica política contra la corrupción en Argentina: “No pararemos hasta alcanzar la verdadera democracia. ¡Libertad, justicia!”; así presentó el artista su tema “Lejos de la ciudad”. También emocionante fue su homenaje a la capital española con “Llegué hasta ti”: “Esta canción se la escribí a Madrid, que me acogió durante años. Es una ciudad, como decía Sabina, tan insufrible como insustituible”. Y así, con otras grandes actuaciones como las de “Semillas”, “Canto pal que está despierto” o “A volar”, Muerdo se despidió del festival.

Rayden, en su hábitat natural

“Hago canciones y, por suerte, la gente las escucha”. Y, por suerte, Rayden hace canciones. El artista alcalaíno y sus cinco músicos vuelven al Festival Río Babel para inundarlo de palabras y mucho, mucho rap, que más tarde retomaría Residente en el mismo escenario. Como siempre, Rayden dio un espectáculo de personalidad, presencia escénica y carisma en su hábitat habitual: los conciertos en directo. Así, animando constantemente al público y agradeciéndoles aguantar al sol, llevó al festival grandes éxitos como “Calle de la Llorería”, “Haz de luz”, “A mi yo de ayer” o “Matemática en la carne”, con su último y mítico verso “clímax, final feliz” cerrando el concierto mientras llovía confeti. Pero tres fueron los momentos más especiales: la actuación de “El Gobierno de las canciones” con Pedro de Ciudad Jara (cuya banda actuó ese mismo día en el festival), los globos volando entre el público durante “La mujer cactus y el hombre globo” y, por último, la presentación de su banda (con Mediyama como corista) mientras sonaba “Terra” de sus compañeras del Benidorm Fest para cerrar el evento por todo lo alto.

Residente, la voz de un continente

Hubo que esperar hasta el tercer día para disfrutar del cabeza de cartel del Río Babel, pero mereció la pena. Al contrario de muchos de sus compañeros del festival, Residente inició el concierto con sus tres temas más populares: su sesión con Bizarrap, “Flow HP” y “Atrévete-Te-Te”. Más tarde llegarían temas como “El aguante”, “Muerte en Hawaii” o “La vuelta al mundo”, con la que anunció que estaba escribiendo su primera película: “A mí me gusta escribir mucho. Me gusta el rap, pero era mi hobby, no mi sueño. Yo siempre quise hacer cine”. Y cerró el concierto con tres canciones: “El futuro es nuestro”, “No hay nadie como tú” y “Vamo’ a portarnos mal”.

Entre medias, Residente demostraría con “Latinoamérica” que no es solo un rapero, sino la voz de todo un continente al que apenas escuchamos: “Este tema se lo dedico a todos los latinoamericanos, y quiero que la gente de acá de España sienta la misma pasión que nosotros cuando la cantamos”. Luego llegaría “This is Not America”, con el que dejó claro que “América no es solo Estados Unidos; son todos los países”. La crítica social y política es el pilar de Residente, así que también quiso alzar la voz por las personas inmigrantes que se ven obligadas a cruzar fronteras con “Pa’l norte”, dedicada “a los inmigrantes y a quienes los reciben y les dan un buen trato. Acá está mi hijo de siete años, que es de las primeras veces que me ve en un concierto. Yo me pongo en el lugar de los padres de los niños que han matado en la frontera y no sé qué haría. Es importante que nos pongamos en su lugar”. Y con las palabras de Residente en la cabeza, volví a cruzar el puente del río Manzanares por última vez con la esperanza de volver a hacerlo el año que viene. Hasta 2023, Río Babel.